Evolución de la inversión extranjera en España
Nuevas normas alientan a inversores de países desarrollados a realizar operaciones de manera segura. Servicios, sustentabilidad e innovación se destacan entre los sectores con más movimiento. Si usted está interesado en sondear el país ibérico como arena de sus inversiones, a continuación, le brindamos un panorama general.
Durante el último lustro la inversión extranjera en España creció un promedio interanual del diez al doce por ciento. Solo en 2023 superó los 28 millones de euros. Estos datos del Registro de Inversiones Exteriores de la Secretaría de Estado de Comercio demuestran la confianza que tienen los inversores en la economía española.
En particular, se destacan los proyectos de inversión dirigidos a aumentar la capacidad productiva y el empleo. Estos crecieron cerca del doce por ciento interanual.
Entre los países que más invierten en España, se destaca Estados Unidos (28,9%), seguido por el Reino unido (13,1%), Alemania (10,6%) y Francia (9,2%). Asimismo, en los últimos dos años aumentaron las inversiones de Australia, Suiza, Canadá y México.
Por sectores, el 54,3% del total de la inversión se dirigió a los servicios, el 42,2% a la industria y el 3% a la construcción. También se destacan subsectores como el comercio al por mayor, las telecomunicaciones, la energía eléctrica y los combustibles.
La Comunidad de Madrid sigue siendo el principal destino de más del 54% de la inversión extranjera. Sin embargo, durante los últimos meses también se registró una evolución de la inversión en las regiones de Cataluña y la Comunidad Valenciana.
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Marco normativo y el real decreto 571/2023
España cuenta con un marco normativo que promueve la libertad de movimientos y operaciones para quienes desean invertir en el país.
El Real Decreto 571/2023 del 4 de julio sobre inversiones exteriores actualizó el régimen de declaraciones. El mismo aplica tanto para las inversiones extranjeras en España como las inversiones españolas en el exterior. Entre sus modificaciones, se destacan:
- introdujo el concepto de inversión directa;
- mejoró la calidad y comparabilidad internacional de las estadísticas;
- adecuó las últimas modificaciones a la Ley 19/2003 y al Reglamento (UE) 2019/452 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 19 de marzo de 2019;
- redujo las cargas administrativas para el inversor; y
- especificó los supuestos de suspensión del régimen de inversiones extranjeras.
Además de estas modificaciones fundamentales, existen otros instrumentos que regulan las inversiones. Por ejemplo, en su art. 63, el Tratado de Funcionamiento de la Unión europea (TFUE) prohíbe cualquier restricción a los movimientos de capital entre Estados miembros y países terceros.
En la misma línea, el art. 65.1. b) del mismo tratado faculta a los Estados miembros para establecer procedimientos de declaración de movimientos de capital a efectos de información administrativa y/o estadística.
El 29 de enero de 2024 se aprobó una nueva orden ministerial que regula los procedimientos aplicables a las declaraciones de inversiones exteriores. También se actualizaron los procedimientos para la presentación de memorias anuales.
También fue clave la Resolución del 31 de enero de 2024 de la Dirección General de Comercio Internacional e Inversiones. Así se logró que la autoridad apruebe los modelos destinados a la tramitación y declaración de las inversiones.
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Aumento de la inversión extranjera directa en España
Como acabamos de ver, el Real Decreto 571/2023 introdujo el concepto de inversión directa. Este enfoque resultó muy bien recibido por quienes apoyan los proyectos de sustentabilidad, tecnología e innovación.
Las inversiones directamente dirigidas están siendo muy satisfactoria en volumen y calidad. En ese sentido, España se sitúa en el puesto número 4 entre los países con mayor número de proyectos para instalaciones productivas. Le anteceden Estados Unidos, Reino unido y Alemania.
De hecho, la inversión extranjera directa cayó un 28% en las principales economías desarrolladas, mientras que en España solamente retrocedió un 18,5% el último año. El país ibérico mantiene de esta manera una posición competitiva como destino preferente de la inversión extranjera.
Gran parte de estas inversiones están yendo fundamentalmente a sectores de alto valor agregado, como las energías renovables. Asimismo, España es uno de los países con más proyectos de I+D, inteligencia artificial e infraestructuras de Internet.